Cortar las uñas de un bebé es una labor que para muchos resulta muy complicada. Los deditos de un bebé son muy frágiles y sus uñas aún son bastante blandas comparadas con las de un adulto. Sin embargo, las uñas son una de las partes que más se ensucian y en donde más bacterias se alojan. Así que, para que tu bebé tenga una correcta higiene, es necesario que le cortes sus uñitas de vez en cuando.
Para cortarlas necesitas un cortaúñas especial para bebés o una tijerita de puntas redondeadas. Debes tener cuidado de no dejar ninguna irregularidad en sus uñas porque podría clavarse en el dedo de tu bebé a medida que la uña crezca y podría lastimarse a sí mismo. No es necesario que las limes, lo importante es que la uña tenga una forma recta.
El mejor momento para cortar las uñas de tu bebé es después del baño. En este momento los bebés están muy relajados y además sus uñitas estarán reblandecidas. También es aconsejable hacerlo cuando tu bebé se encuentre profundamente dormido. El corte de las uñas puede realizarse una vez por semana, de acuerdo con cada bebé.
Después de haber cortado las uñas, debes revisar cuidadosamente que no haya quedado ningún pedazo de uña suelta porque podría hincarse en la piel de tu bebé. Debes dejar muy limpia la zona y, para terminar, puedes pasar un pañito húmedo sobre sus manos para que queden libres de cualquier residuo.
Recuerda que un bebé limpio es un bebé sano. Las uñas son uno de los lugares donde se acumulan más bacterias y suciedad. Así que utiliza estos consejos para que tu bebé las tenga siempre limpias y libres de bacterias.